Hace más de 20 años que Bilma Acuña comenzó a realizar trabajos comunitarios en Ciudad Oculta. Las poblaciones de Villas de Emergencia en Argentina sufren desde hace décadas el flagelo social. "Cuando los militares ocuparon el poder, en marzo de 1976, en la Ciudad de Buenos Aires vivían exactamente 224.885 villeros". Durante la dictadura se puso en funcionamiento el Plan de Erradicación de Villas de Emergencia. Con el regreso de la democracia, sus habitantes comenzaron a sufrir otro tipo de violencia. La falta de trabajo, la falta de oportunidades y la decadencia.
En Ciudad Oculta comenzaron a formarse redes de familiares, madres y vecinos para poder batallar contra esta problemática. Con la llegada de la droga muchos chicos murieron y sufrieron una nueva forma de violencia. Si bien todas las drogas son peligrosas y dañinas, cuando comenzó la venta de Paco en Ciudad Oculta sus habitantes notaron que el consumo era diferente, provocando un mayor deterioro físico.
Bilma sufre en carne propia los problemas de su comunidad. Sin embargo, apuesta por la vida. Demostrando con el ejemplo, apelando a la justicia y a la fuerza que le dan otras familias que sufren el mismo dolor.