Esteban Uriarte, hombre controvertido de la noche santafesina, dueño de un boliche llamado X-Ray es asesinado. Así comienza la investigación para saber quién mató al Bebe Uriarte.

Juan Moya busca entre las cosas de Vázquez algún dato que aclare su muerte y lo acerque a la muerte de Uriarte. El socio de éste visita a Carlota para obtener una respuesta respecto al club X-Ray.

Para la investigación por la muerte del dueño del X-Ray, Segovia es sospechoso y lo mandan a seguir.

Juan logra acercarse a Carlota. El guardia de seguridad de X-Ray salió como culpable del asesinato de Uriarte mediante un análisis de balística y es asesinado de un tiro en la sien.

Juan sigue tras las huellas del padre de Carlota y descubre que está en un negocio turbio. Además, intenta saber si la esposa de Uriarte tiene algo que ver con el asesinato de su marido.

Rodolfo, el padre de Carlota, quiere vender X-Ray pero se entera de algo que hizo Uriarte antes de morir que le complica los planes.

Uriarte le comenta a Kesler que tiene un hijo con una bailarina del X-Ray. Por otro lado, Juan logra identificar el diálogo de la grabación que tiene de Kesler.

Kesler le va a entregar un bolso con dinero a Juan para que éste no lo delate con sus negocios turbios.

Jenny es la encargada del intercambio del dinero, y en el momento en que el hombre de Kesler le va a hacer entrega del bolso, ésta lo apuñala en la garganta y sale corriendo.

Jenny le confiesa a Juan su gran secreto y Juan le cuenta a Jenny cuál era su vínculo con el Bebe Uriarte.

Juan Moya se encuentra amenazado por el hombre que silba, pero en un forcejeo logra librarse y matarlo. Juan llevará el cuerpo de Jenny al río y prenderá fuego su casa rodante.

La policía busca a Juan mientras él y Carlota se esconden en la isla.

Juan entierra a su padre y lo recuerda junto a Carlota. Carlota llama a su padre, luego de enterarse de los negocios turbios que tiene, y lo amenaza.